Persona mayor

Participamos en la Estropatada contra las enfermedades neurodegenerativas

En la Residencia Txurdinagabarri participamos en la Estropatada 2023, una peculiar carrera de «biopatos» por la Ría de Bilbao para recaudar fondos contra las enfermedades neurodegenerativas. Hace unos días, pudimos por fin recoger nuestros patos de recuerdo.
Tres patos pequeños de goma de color amarillo
Algunos de los patos de goma que se usaban en las Estropatadas.

El 1 de octubre se celebró en Bilbao la Estropatada 2023, un multitudinario evento anual que recauda fondos para luchar contra las enfermedades neurodegenerativas y cuyo acto central es una carrera de «biopatos» en la ría de la capital vizcaína.

En la Residencia Txurdinagabarri estuvimos comentando con las personas residentes sobre esta actividad, y decidimos participar. Para ello, hay que comprar un ticket que te da derecho a tener un pato en la carrrera fluvial. O mejor dicho, un «biopato», ya que en las 6 primeras ediciones los patos eran de goma, en los años 2019 y 2020 se sustituyeron por piñas de pino, y en 2021 ya se comenzaron a utilizar patos hechos de materiales de origen vegetal. El día de la carrera, todos los «biopatos» se lanzan a la ría desde un puente y la corriente los va desplazando, hasta que llegan a un punto. Los patos llevan una etiqueta de radiofrecuencia, y a través de una aplicación es posible seguir la posición de cada uno de ellos en la carrera con un teléfono móvil. Los patos que llegan en las primeras posiciones obtienen premios.

El día 27 de septiembre fuimos con un grupo de residentes hasta el stand de The Walk On Project (WOP) —la fundación que organiza la Estropatada— para comprar los tickets. Compramos cinco patos, uno por cada planta, pero también compramos algún que otro ticket a título individual, para ayudar en la lucha contra las enfermedades neurodegenerativas. También aprovechamos para dar un paseo por el centro de Bilbao, y tomar algo en una cafetería.

El día de la carrera no hubo suerte. Estuvimos viendo en vídeo el desarrollo de la travesía por la ría, pero nuestros patos no fueron especialmente rápidos y no pudimos obtener ningún premio. Sin embargo, nuestros tickets nos daban derecho a recoger unos patos de goma de los antiguos como recuerdo, y hace unos días, el día 14 de noviembre, nos acercamos hasta Deusto, a la tienda de The Walk On Project, y allí nos dieron nuestros patos, que ahora nos acompañan en la Residencia.