Nerea Meabe: “El exoesqueleto Atlas 2030 mejora la calidad de vida de niños con parálisis cerebral”

Nerea Meabe, fisioterapeuta especialista en neurorrehabilitación de Hermanas Hospitalarias Aita Menni, presentó los resultados de nuestra investigación con el exoesqueleto Atlas 2030 en la rehabilitación de niños y niñas con parálisis cerebral y patologías afines, en las ‘Jornadas sobre Innovación Tecnológica en Rehabilitación: La robótica al servicio de la salud’ celebradas en Murcia.
Nerea Meabe, durante su intervención en la UCAM

El pasado 19 de abril, la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) celebró las ‘Jornadas Científicas de Innovación Tecnológica en Rehabilitación: La robótica al servicio de la salud’. Organizado por la Facultad de Fisioterapia, Podología y Terapia Ocupacional, el evento reunió a profesionales de los ámbitos sanitario y clínico, científico y docente. El objetivo principal de este encuentro era conocer los últimos avances en tecnologías aplicadas a la rehabilitación infantil, concretamente los resultados de investigación sobre el exoesqueleto Atlas 2030, desarrollado por la empresa Marsi Bionics.

Avance significativo en rehabilitación

En este contexto, Nerea Meabe, fisioterapeuta especialista en neurorrehabilitación de Hermanas Hospitalarias Aita Menni, presentó el estudio «Impacto de exoesqueleto infantil ATLAS 2030 en la funcionalidad de la marcha y calidad de vida en niños y niñas con parálisis cerebral o patologías afines» que ha llevado a cabo en Gipuzkoa junto con Irma García, fisioterapeuta pediátrica y coordinadora de la Unidad de Rehabilitación Infantil.

En Europa, 1,8 de cada mil nacimientos pueden resultar en incapacidad de marcha. El Atlas 2030 es un innovador dispositivo, diseñado para población infantil con parálisis cerebral y condiciones neuromusculares similares, que ha demostrado ser un avance significativo en la mejora de la funcionalidad de la marcha y la calidad de vida. Su chasis regulable no solo permite una marcha funcional en todas las direcciones, sino que también ofrece una mayor precisión de movimiento y reduce el esfuerzo del terapeuta.

Nerea Meabe recalcó que la actividad física estimula el crecimiento de la sustancia blanca y gris del cerebro, mejorando las funciones cognitivas; que la bipedestación es muy importante para la prevención de deformidades de columna y articulaciones, y complicaciones respiratorias, para el desarrollo social y emocional. El Atlas 2030 da respuesta a estas necesidades al tiempo que promueve la interacción con el entorno y la relación del pequeño/a con los demás.

La metodología del estudio, desarrollado en colaboración con la Asociación ASPACE Gipuzkoa y con ayuda de la Diputación Foral de Gipuzkoa involucró a niños y niñas de 2 a 14 años con parálisis cerebral y dificultades para caminar. Durante 6 semanas, se llevaron a cabo 4 sesiones semanales con el exoesqueleto Atlas 2030 un protocolo específico diseñado para evaluar la capacidad de marcha, la función motora gruesa y la calidad de vida.

Danelle, una niña participante en el proyecto, utilizando el exoesqueleto

Resultados de la investigación con el exoesqueleto Atlas 2030

Los resultados señalan que se observó un aumento significativo en el número de pasos, la distancia recorrida en seis minutos y la puntuación total en la evaluación de la función motora después de la intervención. Además, los cuestionarios de calidad de vida revelaron mejoras fisiológicas, así como en la participación social y bienestar emocional. Los testimonios de los participantes y sus familias reflejaron mejorías en aspectos como la calidad del sueño el desempeño de actividades de la vida diaria y la interacción social.

Según el estudio, “el exoesqueleto Atlas 2030 mejora la calidad de vida de niños con parálisis cerebral y patologías afines”. Las conclusiones demuestran que este dispositivo se perfila como una herramienta segura y efectiva para mejorar la marcha y la calidad de vida de niños y niñas con parálisis cerebral y patologías afines (discapacidades neuromusculares). A pesar de algunas limitaciones de la investigación (como la falta de un grupo de control y la fatiga después del programa intensivo) los resultados obtenidos son prometedores y revelan un gran potencial del exoesqueleto de Marsi Bionics para la rehabilitación infantil. Nuestra ponente recordó que esta evidencia científica impulsa la utilización del exoesqueleto pediatrico en el tratamiento de niños y niñas con diferentes síndromes y enferemedades raras, como por ejemplo el síndrome Ctnnb1.

La jornada —que contó con la participación, además, de la doctora Lola Gor por parte de la empresa desarrolladora; la doctora María Antonia Murcia González, secretaria del Grado en Fisioterapia; Elena González, madre de un niño con atrofia muscular espinal (AME), y la doctora Marina Ferre como moderadora— culminó con la presentación en vivo del dispositivo Atlas 2030 mostrando su aplicación práctica con un niño con parálisis cerebral.